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El Producto Interior Bruto (PIB) de la Comunidad de Madrid y de España crecieron un 0,3% entre julio y septiembre, impulsados por el consumo, pero lastrados por la inversión. En cuanto al incremento interanual, la región madrileña se volvió a situar al frente del crecimiento económico del país con un 2,1% de aumento, mientras que el del conjunto de España se situó en el 1,8%.
Este auge del consumo viene dado por el aumento de los salarios y del empleo, así como por la mejora de la confianza de los consumidores. El consumo de los hogares se ha elevado un 1,4% en el tercer trimestre, su mayor avance trimestral desde el cuarto trimestre de 2022.
Estas cifras reflejan el posicionamiento de la Comunidad de Madrid como motor económico a nivel nacional, ya que prácticamente 2 de cada 3 euros de inversión extranjera que llegan a España llegan a Madrid, “con más de 7.500 millones de euros, es decir, el 63,2% respecto al total nacional”, según explicó el director general de Economía de la Comunidad de Madrid, Juan Manuel López Zafra.
Esta región también lidera la creación de empresas. Según el Gobierno regional, Madrid ha estado al frente de la creación de empresas en los nueve primeros meses del año, con más de 18.000 nuevas sociedades, lo que supone el 22,5% del total nacional y el 19,1% del capital suscrito.
Para el presidente de la Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Madrid, Ángel Asensio, “estos datos indican que la economía española y la madrileña siguen creciendo, y que la Comunidad de Madrid se mantiene al frente del crecimiento del Producto Interior Bruto del conjunto del país”, pero ha recordado que es importante seguir trabajando para impulsar el crecimiento de la inversión en toda la región. “Tenemos que seguir remando juntos y aunando esfuerzos para conseguir no solo que la región madrileña siga creciendo a nivel empresarial, sino que continúe progresando para seguir siendo el principal motor económico de España”, ha puntualizado.
Por otro lado, la caída de la inversión se debe a factores como la incertidumbre económica, el aumento de los costes de producción y la escasez de suministros. La inversión en bienes de equipo cayó un 4,8% en el tercer trimestre, su mayor caída trimestral desde el segundo trimestre de 2020. “La inversión extranjera en España está cayendo porque para los inversores es importante contar con una estabilidad institucional en España”, han puntualizado desde la entidad cameral.